Portavoces de la fe

Casablanca | Febrero 2018

En todo debate que toque temas en los que alguien expresa una teoría, ya sea la igualdad en cuestiones de herencia, o la libertad religiosa, los derechos de la mujer, las libertades individuales, etcétera, siempre salen algunas voces que protestan por la ausencia de la opinión contraria. Y la opinión contraria, en este caso, es simplemente la visión que tengan los teólogos y los doctos de la fe.

No le otorgan la legitimación del conocimiento religioso a quien no se ponga la sotana del teólogo

Llama la atención el detalle, porque hablamos de una religión cuya característica más destacada es que rechaza todo mediador entre el creyente y su Señor. Pero son los propios musulmanes los que han decidido que el teólogo y el imam sean los únicos que puedan hablar en nombre de la religión. Hay más de uno por ahí que te pregunta por alguien que entienda de la religión, pese a que esté frente a un investigador que se conoce muy bien los versos coránicos, los analiza y los debate… Pero ese creyente no le otorga al investigador la legitimación del conocimiento religioso, mientras no se ponga la sotana del teólogo. Solo el teólogo y el imam poseen legitimidad para sentar cátedra en asuntos religiosos… ¿Y qué se responde a los que proclaman eso?

Luego, para ser objetivos… ¿qué proporción de púlpitos mediáticos se pueden clasificar en la categoría de laicos, comparados con los púlpitos religiosos en los medios de comunicación? ¿Cuántos programas religiosos hay en nuestros canales de televisión pública y privada? ¿Por qué nadie pregunta nunca por una opinión contraria cuando nos inunda la opinión religiosa desde la tribuna mediática? ¿Por qué nadie pide un equilibrio de pareceres ante la apabullante cantidad de fetuas y prédicas religiosas? Sabiendo, además, que en el islam no hay mediador entre Dios y los fieles. Eso lo decimos todos… Pero la mayoría de la gente sí busca a un mediador religioso, ya sea el imam o el teólogo o un programa de televisión dedicado a la religión.

Pedid equilibrio a las estrellas de las emisiones religiosas en los canales de satélite

Desde hace quince siglos solo se han levantado voces religiosas. Multitud de voces ilustradas fueron declaradas herejes y exterminadas. Fueron arrasadas por las prédicas espirituales y mundanas. Y nadie pide equilibrio. Hasta hoy día siguen dominando en la mayoría de los púlpitos. Declaran herejes a los demás y producen prédicas extremistas y fetuas que mezclan la ciencia con la religión. Y cuando se consigue abrir un debate libre sobre temas que se escapan a las prédicas conservadoras, entonces, solo entonces preguntamos por la opinión divergente y el equilibrio.

Pedid equilibrio a las estrellas de las emisiones religiosas. Pedídselo a las lumbreras de los canales por satélite.

No necesitamos en todo debate la voz de un hombre de la religión. Tiene derecho el creyente de acudir a uno, cuando le da por ahí… pero cuando no está presente, denunciar esa ausencia en algunos debates y lugares es una muestra de sesgo y falta de objetividad. Porque está presente en todos los temas, todos los momentos y lugares.

·

© Sanaa El Aji | Primero publicado en MC-Douliya· 19 Febrero 2018 | Traducción del árabe: Ilya U. Topper

¿Te ha interesado esta columna?

Puedes ayudarnos a seguir trabajando

Donación única	Quiero ser socia