Víctimas de segunda
Amira Hass
La guerra “casi nueva” desencadenada el 11 de noviembre pasado le ha costado la vida a 16 personas. Catorce de ellas son palestinos de Gaza, muertos bajo el fuego israelí. Siete de estos eran combatientes de Hamás que habían impedido la operación de una unidad israelí que había penetrado de forma camuflada en la Franja de Gaza, no por la primera vez, por cierto. Las otras siete personas, dos civiles y cinco combatientes, murieron bajo fuego israelí el día siguiente. Cuatro edificios quedaron destruidos hasta los cimientos.
La censura militar ha prohibido revelar la identidad del comandante israelí muerto
La censura militar ha prohibido revelar la identidad del comandante israelí muerto y el nombre de su unidad. Una diputada laborista escribió en su página de Facebook que no se trata de un judío, sino de un druso, uno que “servía” para morir en una operación militar, pero que por lo demás era un ciudadano de segunda clase, acorde a la nueva ley sobre el Estado-nación.
Los grupos armados de Gaza han lanzado aproximadamente cuatrocientos cohetes contra las poblaciones israelíes más cercanas, aunque la mitad ha caído al suelo dentro de los límites de Gaza. Hubo algunos heridos. Muchos edificios sufrieron daños. Murió una persona. Se trata de un obrero de la construcción palestino de 48 años, oriundo de Halhul en Cisjordania,que compartía un apartamento en un barrio pobre de Ashkelon. Junto al hombre se encontraba una mujer que quedó gravemente herida por el desplome del techo. Esto puede explicar por qué los medios de información palestinos y las redes sociales no han insistido mucho en esta tragedia.
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© Amira Hass | Primero publicado en Internazionale | 19 Noviembre 2018 | Traducido a partir de la versión italiana de Andrea Sparacino por Ilya U. Topper
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