Artes

Tala Madani

M'Sur
M'Sur
· 3 minutos
Las bolas de barbilla con banderaDesplegable para imprimir  - 1

Títulos de las obras:
Chinballs with flag [Las bolas de barbilla, con bandera] |  Foldouts for prints 1 [Desplegables para imprimir  1] |  Man in Cape [Hombre con capa]  |  Projector  [Proyector]  |  Red Stripes with Stain [Rayas rojas con mancha]  |  Set dressing  [Decorando el escenario]

El varón retroproyectado

En los primeros años de este siglo, mientras el arte iraní empezaba a alcanzar cotizaciones nunca vistas en el mercado internacional, una joven creadora nacida en Teherán en 1981 comenzaba su despegue en Estados Unidos. Desde entonces, Tala Madani se ha convertido en una figura más que respetada, representada por una potente galería londinense –Pilar Corrias– y con obra en importantes colecciones de Europa y América.

Una pintura muy narrativa, de pincelada suelta y colorista, es su principal característica junto a un claro mensaje desacralizador del varón: sus personajes masculinos aparecen una y otra vez degradados, ridiculizados, desnudados y expuestos a trances escatológicos, aunque siempre pasados, también, por el tamiz del humor. Al explicar por qué no representa a mujeres en sus lienzos, asegura que «es más complicado, aunque en realidad los tipos que dibujo podrían pasar por ellas sólo con que les pusiera pelo o algún rasgo femenino. Pero yo no quería eso, estaba interesada en comprobar qué pasa cuándo los hombres están solos en la escena».

Entre sus principales influencias se cita a menudo a maestros del cómic como Alan Moore o Robert Crumb, así como la pintura de goteo de Jackson Pollock o la técnica de derrame pictórico de Morris Louis. Pero basta indagar un poco más en su obra para encontrar huellas del minimalismo y el pop, de las artes gráficas orientales –los hombres actuales como modernos Budas– o guiños a prestigiosos destructores de normas como Francis Bacon, entre muchos otros referentes. Ella misma añade las ilustraciones de la revista satírica azerí Molla Nasreddin, una publicación humorística que reivindicaba los derechos de las mujeres y desde un fuerte anticlericalismo.

El arte de Tala Madani, en efecto, no desaprovecha nada de la historia del Arte. Ni siquiera a los niños de la colección clásica de iniciación a la lectura Learn to read de la editorial Ladybird, con los que ella misma se inició en el inglés, y donde se hacían evidentes los roles de género conservadores de la cultura británica en la década de 1950. La creadora iraní afincada en Los Angeles somete a estos personajes a situaciones más o menos insólitas y absurdas, desafiando continuamente la mirada y la sensibilidad del espectador.

Ahora y hasta el 24 de agosto, la artista exhibe en el Centro Andaluz de Arte Contemporáneo (CAAC) de Sevilla 52 piezas procedentes de museos y colecciones de todo el mundo: 41 pinturas realizadas en los últimos cinco años, una escultura con videoanimación y diez videoanimaciones para las que utiliza la técnica stop frame. La muestra, titulada Retroproyección, ha sido comisariada por Abi Spinks y es una colaboración con Nottingham Contemporary.

[Alejandro Luque]