Alto ahí. Lloremos

por Georges Salameh
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Ante las ruinas

…No quedan otras memorias de mi infancia, y he olvidado hasta las facciones de mi padre. De mi madre, una figura flotante, solo recuerdo la sonrisa que cubría su cara y un anillo de oro, con una perla engarzada, que llevaba en el dedo anular.

Pero no se me ha olvidado el último capítulo de mi vida allí, aquel que me ha llevado tan lejos bajo los cielos relucientes de este ‘Mar Blanco de Enmedio”. Aquí no cambia nada, y nunca podré escapar de esta orilla, por muy lejos que viaje a través de las olas enfurecidas.

No he olvidado ese capítulo, pero lo he rechazado, temiendo por mi salud mental.

Sé ahora que el día que caminaba sobre estas arenas, mi memoria, todo lo que he alguna vez he vivido, se ha convertido en un libro que olvida sus páginas. En cuanto un recuerdo preciso emerge en la superficie ya se desvanece en las profundidades, en el olvido.

Mi vida está escrita en folios imposibles de encuadernar, que el viento los dispersa cuando les quito el polvo.

Los poemas y los rezos que yo alguna vez repitiera, en recitación solitaria o junto a mi abuela, esos que todos los guerreros de mi tribu se sabían de memoria, los he olvidado.

Y desde que soy yo, abandonado ahora por todas las memorias, arrastrándome como un cangrejo rojo sobre la arena brillante, ¿qué puedo hacer aparte de recordar ese preciso capítulo de mi vida, evitado tanto tiempo, que me ha llevado tan lejos? Antes de que la soledad y las lágrimas me desgarren.

¿Tal vez mi alma que habita en este laberinto de arenas encuentre al final un poco de paz?
¿Tal vez la oscuridad del pozo de mi infancia me engulle?
Tal vez encuentre al final, entre los pecios y sus sedimientos, un sendero al que seguir a través del mundo humano para poder completar ese poema?

Alto ahí. Lloremos (desde 2000 y continuando)

Alto ahí. Lloremos es una obra inspirada por la poesía y la vida de Imru’l Qais – إمرؤ القيس – , un poeta árabe y autor de una de las famosas 8 baladas ‘suspendidas’ de la época de la Yahilía, la era preislámica.

Estas imágenes, objetos, documentos, archivos, textos y materiales audiovisuales son una meditación sobre los orígenes, las ruinas y la vida errante.

También son una una breve narración de objetos migrantes que fueron rescatados de ese baúl de la isla de tesoros que se ha dado en llamar infancia.

Desde que huí de Líbano en un ferry de alta velocidad, hacia finales de la guerra civil, he visitad pocas veces el país donde nací.

Tras varios intentos fallidos de documentar estos pocos “regresos”, acabé descubriendo ubicaciones de territorios inexplorados y prohibidos, traumaisajes *) de los años que viví en Líbano, alargando mi viaje “a casa”. En lugar de acercarme a la meta, el trayecto parece interminable, como si regresar fuese imposible y el autoexilio un estado mental.

Esta serie se consiguen disponiendo significados, una descripción detallada y una comparación creativa de la realidad.

El estilo busca a ratos ser obsceno y herir, otras veces tiende hacia lo noble y soberano.

*) Los traumaisajes son lugare asociados con un pasado doloroso. Recordar y representar ese pasado amargo juega un rol vital a la hora de conformar el futuro a través del aprendizaje y el experimento.]

[George Salameh. Traducción del inglés: Ilya U. Topper]