Nombres


Página en obras Página en obras

 

Cuando un personaje tiene ya una gran difusión en prensa española, con forma consensuada, se mantiene: el rey Abdalá de Jordania (en lugar de Abdullah), el dirigente de Hizbulá, Hassan Nasralá (no Nasrallah), el político iraní Mahmud Ahmadineyad (no Ahmadinejad), la cantante egipcia Um Kulzum (no Kulthum). 

En los demás casos se intenta siempre elegir la transcripción que indique el propio interesado, por ejemplo en una tarjeta de visita. También un perfil en una red profesional o en la web oficial de su organización o empresa, una cuenta en una red social o incluso la dirección de su correo electrónico puede indicar cuál es la transcripción que el interesado considera correcto (aunque ocurre que una persona utilice diferentes versiones en distintas redes).

Si no se tiene acceso a una prueba directa, se comprueba si en el país en cuestión existe una forma establecida y consensuada de transcribir el nombre, por ejemplo en diarios locales en lengua extranjera. En Marruecos, Argelia y Túnez, la prensa francófona es un estándar a seguir: escribiremos Abdelaziz Bouteflika, Driss Jettou, Mohamed Ghannouchi, sin modificar. En Israel, la prensa local anglófona está muy establecida; escribiremos Avigdor Lieberman (no Liberman). Menos claro está el asunto en Líbano o Egipto, donde también existe prensa local anglófona, pero se observan a menudo diferencias entre varios periódicos o incluso en el mismo diario (Suleiman Frangieh y Sleiman Franjieh, o Mohammed Morsy junto a Mohammed Morsi).

En el caso de políticos se puede consultar material de campaña; para escritores es útil averiguar si existe una forma consensuado de aparecer en la portada de libros traducidos a idiomas de grafía latina.

Si se trata de una persona con escasa o nula presencia en medios de comunicación, lo preferible es utilizar una grafía análoga a personas del mismo nombre más conocidas: «El alumno Khalid, de diez años, observa las caricaturas de Khalid Gueddar»  No usamos «Jalid» para el nombre del niño, ya que hacerlo sugeriría que tiene un nombre distinto al del famoso dibujante marroquí.

Si no se puede aplicar ninguno de estos criterios, y el nombre no figura en la lista abajo, acudimos a las normas de Transcripción.

Marcas
Los nombres de empresas o medios de comunicación siempre se mantienen tal y como aparecen en productos o portadas que incluyan grafía latina o según el dominio en internet de la empresa. Siempre se escribirá Al Jazeera, EleftheriaYedioth Ahronoth, KommersantFarheekhtegan, sin intentar adaptar estas marcas a la fonética española. Hay empresas que no utilizan su nombre como dominio web,  pero habitualmente es fácil encontrar un consenso internacional de transcripción.

ABCDEFGHIJK LM NO PQ RS TU VWXYZ