Las lenguas afroasiáticas agrupan casi todos los idiomas hablados en la mitad norte de África. Abarca cinco grandes ramas, de las que las dos más difundidas son las semíticas y las bereberes, antiguamente conocidas como ‘lenguas camito-semitas’.
Las ramas son:
semíticas : Agrupan las lenguas árabes, el hebreo, el arameo, las surárabes y el amhárico.bereberes : El tamazigh, hablado en gran parte del Magreb y el tamasheq de los tuareg.cushitas : Difundidas en la costa del Mar Rojo, grandes partes de Etiopía (donde predomina el oromo) y en toda Somalia.egipcio : A esta rama pertenecía el idioma de los faraones, utilizado en las inscripciones jeroglíficas, que sobrevive como copto en el uso litúrgico, aunque ya no tiene hablantes nativos.omóticas : Un grupo de lenguas en el este de Etiopía. Antes se consideraba parte del bloque cushita, hoy se discute incluso si pertenece al tronco afroasiático o no.chadianas : Se hablan solo al sur de Sáhara, desde el lago Chad hasta el norte de Níger y Camerún. El más conocido de ellas es el hausa, una lengua de comercio y difusión internacional.Similitudes Aunque las lenguas afroasiáticas no pertenecen al bloque indoeuropeo , sí comparten con éstas ciertas características estructurales. Esto es especialmente visibles en el caso del árabe , cuya gramática fue estandarizada siguiendo el modelo griego. Así encontramos rasgos como la división de una frase en sujeto, verbo y objeto (directo o indirecto), declinación de los sustantivos, una conjugación verbal con formas de singular y plural, a veces también dual, primero, segunda y tercera persona, la definición de las preposiciones y pronombres…
Además, tanto el árabe como el tamazigh han estado durante al menos dos milenios en estrecho contacto con lenguas indoeuropeas como el griego y el latín y sus derivados. Esto ha llevado a un intenso intercambio de vocabulario en ambas direcciones. Además, tanto las lenguas indoeuropeas del ámbito mediterráneo como las afroasiáticas comparten probablemente los mismos sustratos más antiguos, por lo que a menudo es fácil encontrar raíces que coinciden.