Cooperación Islámica
La Organización de la Cooperación Islámica (OCI o OCI en sus siglas en inglés), más conocida por su antiguo nombre Conferencia Islámica, es una agrupación de Estados con una población de mayoría islámica, que hoy incluye más de la mitad de África y gran parte del sur de Asia.
La Conferencia Islámica se basa en el antiguo concepto de la umma, término que describe la comunidad de todos los musulmanes como una nación única, a través de las fronteras estatales. Fue fundada en 1969 por una treintena de países como una iniciativa de formar una alianza ideológica de los Estados musulmanes frente a la supremacía de Estados Unidos y Europa y la ocupación de Jerusalén —considerada el tercer lugar más sagrado del islam— por Israel en 1967.
En 2011, la hasta entonces Organización de la Conferencia Islámica decidió cambiar su nombre y adoptar el de Organización de la Cooperación Islámica, modificando también su emblema, pero manteniendo las siglas. Aún es habitual referirse a este organismo con el nombre antiguo.
Hoy, lo OCI cuenta con 57 miembros y cinco observadores. Entre estos últimos figura Chipre Norte. La sede central se ubica en la ciudad saudí de Yidda. El secretario general es desde 2016 el saudí Yousef Bin Ahmed Bin Abdul Rahman Al-Othaimeen, que reemplazó a Iyad ben Amin Madani, también saudí, sucesor del académico turco Ekmeleddin Ihsanoglu, que asumió el cargo en 2004.
Más de un tercio de los miembros de la OCI forman parte de la Liga Árabe, pero mientras que ésta reivindica la herencia común de la cultura árabe, sin referencia alguna a la religión, la Conferencia Islámica se basa en el denominador común de la fe. Pero no todos los países miembros de la OCI declaran el islam religión estatal. Algunos son explícitamente laicos, como Turquía, Azerbaiyán o Albania.
Pese a agrupar con países con un importante peso económico o militar, como Irán, Pakistán, Arabia Saudí, Turquía o Nigeria, la OCI ha tenido escasa influencia en los procesos políticos de sus afiliados. Una de las causas es la enorme variedad en la interpretación del islam.
Derechos islámicos
En la cumbre de El Cairo en 1990, la Conferencia Islámica adoptó una Declaración de los Derechos Humanos Islámicos. Se ha interpretado como un contrapeso a la Declaración Universal de los Derechos Humanos de Naciones Unidas, que algunos teólogos islámicos consideran incompatible con la fe islámica, aunque fue respaldada, al redactarse en 1948, por todos los países islámicos de Naciones Unidas, salvo Arabia Saudí.
La declaración de El Cairo, por su parte, sujeta todos los derechos humanos a que sean compatibles con la charia o ley coránica. Pero ha tenido un escaso impacto y no ha podido desplazar la declaración de la ONU como referente universal. Algunos países miembros han incluso implantado reformas legales en consonancia con esta última y opuestas a la de El Cairo, como Marruecos, que en 2004 estableció la igualdad entre los cónyuges y eliminó la obligación del marido a garantizar el sustento de la familia, extremo previsto por la declaración de la OCI.
La Organización por la Cooperación Islámica cuenta con varios comités permanentes para cuestiones económicas, culturales o tecnológicas y financia instituciones educativas, financieras y científicas en Ankara, Estambul, Casablanca, Rabat, Benghazi, Riad, Yidda, Manama y numerosas ciudades africanas y del sur de Asia.